Padre Carlos Macías LC: “Mi sacerdocio siempre lo vi en la Legión y en el Regnum Christi”

Nació en México y conoció a los Legionarios de Cristo y al Regnum Christi a través de sus primos, quienes participaban en actividades de formación y apostolados. “Sin buscarlo, el Señor me trajo a la parroquia y ha sido para mí un desafío aprender hacerlo, a conocerlo y amarlo”, reflexiona sobre su labor como párroco de Santa María de Betania.

Era muy cercano a sus primos, quienes participaban en actividades del RC. Además una prima suya se hizo consagrada. Todo eso coincidió con un período en que en su casa lo estaban presionando para que participara más de la vida de la parroquia, pues se había confirmado y no querían que se apartara de la fe. “Me invitaron a unos ejercicios espirituales y de ahí seguí participando en diferentes instancias de formación y apostolados a partir de mis 16 años”, comenta.

¿Cómo fue su proceso de discernimiento?
La vocación fue surgiendo espontáneamente. Pues siempre se predicaba en las actividades del RC que se buscara la plenitud vocacional a la que Jesús nos llama. En esa búsqueda, a través de la vida del equipo, siendo responsable y charlando con los jóvenes experimenté fuertemente cómo Dios a través de mí llamaba a otro a su encuentro. Me dejó una alegría y un gozo muy fuerte de que podía experimentar el poder colaborar. Comencé a abordar este tema en mi dirección espiritual, luego se enfrió un poco, y le fui dando largas en el asunto.

Para la misa de los 50 años de los Legionarios de Cristo, me invitaron a participar en la organización junto a otros jóvenes. Sentí fuertemente un llamado en la oración, pues le ofrecí a Dios lo que estaba haciendo, fue un momento de encuentro muy grande. Eso me llevó a dar un paso más en la generosidad de sentir el movimiento como cosa mía, que dependía también de mí. Volví de ese viaje muy decidido a tomarme en serio mi discernimiento vocacional. A los pocos meses comencé a vivir con la comunidad de consagrados, realicé ejercicios espirituales y luego hice mis promesas de consagrado. Posteriormente seguí el camino al sacerdocio cuando tuve ese llamado, una vez que ya era parte de la vida consagrada.

¿Qué le atrajo del Regnum Christi, que lo ha llevado a servir en él como sacerdote?
Mi sacerdocio siempre lo vi en la Legión y en el Regnum Christi. Desde lo que viví al crecer: a un sacerdote atendiendo la sección de jóvenes.

¿Cómo ha sido poder vivir su vocación como párroco de Betania?
Sin buscarlo, el Señor me trajo a la parroquia y ha sido para mí un desafío aprender hacerlo, a conocerlo y amarlo. Con el tiempo ha sido una alegría, al descubrir que no estoy haciendo una cosa distinta. Siempre lo uno y otro consiste en la predicación, en la dirección espiritual, en la atención sacramental de las personas. Ha sido una nueva ventana a través de la cual vivir mi llamado.